En el año 2020, al asumir la Alcaldía de Higüey, nos propusimos la meta de conectar nuestra ciudad con el circuito turístico de Punta Cana no solo geográficamente, sino cultural y económicamente. Entendimos que más allá de ser un destino religioso por excelencia, Higüey tenía una riqueza que podía transformar nuestra economía local y fortalecer nuestra identidad: la gastronomía.
Así nació “Saborea Higüey”, una iniciativa municipal pensada para rescatar, promover y proyectar la cocina típica, los productos artesanales y los saberes culinarios que viven en cada rincón de nuestro municipio. No se trataba solo de organizar una feria gastronómica, sino de crear una ruta, un movimiento, una plataforma de desarrollo económico y cultural sostenible.
Desde su primera edición en noviembre de 2020, “Saborea Higüey” demostró ser una idea con alma y con sentido propio. Con la participación de cocineros locales, pequeños productores, artesanos y familias emprendedoras, ofrecimos al visitante la posibilidad de degustar platos típicos, conocer nuestras tradiciones y valorar la creatividad de nuestra gente.
Los objetivos fueron claros: integrar a Higüey a la oferta turística regional, generar oportunidades económicas para los sectores populares, rescatar recetas y productos autóctonos como el casabe, el chivo guisado, los dulces criollos, el queso de hoja, entre muchos otros, y sobre todo, reafirmar nuestro orgullo altagraciano a través de lo que mejor sabemos hacer: servir con el corazón.
En las siguientes ediciones, “Saborea Higüey” creció y se consolidó. Logramos la participación de cientos de visitantes, el reconocimiento de chefs y expertos gastronómicos, la incorporación de nuevos emprendimientos certificados, y algo que nos llena de especial satisfacción: la internacionalización de nuestra cocina. En 2021, llevamos el sabor de Higüey a Nueva York, participando como provincia homenajeada en el Dominican Taste Festival, donde presentamos nuestros productos y platos ante la comunidad dominicana en el exterior.
También rendimos homenaje a los precursores del movimiento gastronómico en Higüey, como el siempre recordado, querido ingeniero Darío Yunes, creador de la Feria de la Yuca y de la Leche, reconociendo en su legado el cimiento de lo que hoy hemos construido.
Pero quizás el mayor logro de “Saborea Higüey” ha sido intangible: reconciliar a la ciudad con su identidad culinaria, despertar en nuestros jóvenes el interés por emprender desde lo local, y mostrar que en Higüey no solo hay fe y hospitalidad, sino también sabor, cultura y talento.
“Saborea Higüey” se convirtió en un símbolo de cómo un municipio puede impulsar el desarrollo a partir de su propia esencia. Hoy, como senador de la provincia La Altagracia, me enorgullece decir que ese sueño que hicimos realidad en la alcaldía, pronto lo impulsaremos a que se convierta en una política nacional.
Estamos trabajando, desde nuestras funciones legislativas, para que esta visión de desarrollo gastronómico, cultural y turístico se eleve a todo el país, y llegue a cada rincón donde haya un plato típico, una receta heredada, un productor rural o una comunidad con identidad.
Muy pronto, sabrán cómo lo haremos.
Porque cuando un pueblo redescubre su sabor, encuentra también el camino hacia su futuro.
Rafael Baron Duluc Rijo