Tras la confiscación del avión oficial del presidente Nicolás Maduro en suelo dominicano por orden de las autoridades de Estados Unidos, la Cancillería de Venezuela acusó a República Dominicana de cómplice delincuencial de ese país norteamericano.
Venezuela ha dicho que se trata de una «práctica criminal» aplicada por EE.UU. «justificándose» en las numerosas sanciones aplicadas contra altos funcionarios chavistas en los últimos años.
En un comunicado, la nación señaló que Estados Unidos utilizó su poderío económico y militar para amedrentar y presionar a la nación caribeña.
“Una acción que demuestra que ningún Estado o Gobierno está a salvo de este tipo de actos que van contra el derecho internacional”, indica el texto.